Con el objetivo de reducir la emisión de contaminantes de los vehículos motorizados en la Ciudad de México desde hace 33 años, nació el programa de Verificación, aunque lleva bastante tiempo implementando y ha sufrido diferentes mejoras, muchos conductores siguen sin saber cuál es la importancia y si realmente la verificación es un trámite necesario.
¿Qué es la verificación?
La verificación busca reducir los altos índices de contaminantes que hay en la Ciudad de México en donde se han implementado medidas de reducción vehícular por las contingencias ambientales.
Este programa comenzó en 1989 en el Distrito Federal donde se detectaron altos índices de contaminación ambiental, por esa situación, las autoridades decidieron realizar estudios de calidad del aire, arrojando como principal causante los vehículos automotores.
Por lo cual se implementó un programa de revisión de automóviles para monitorear sus emisiones contaminantes basado en la especificación del programa Buró de Reparaciones Vehiculares de Los Ángeles, California.
Fue hasta el año de 1997 cuando las autoridades autorizaron 59 verificentros y se comenzaron a medir otros contaminantes como Óxidos de Nitrógeno (NOx).
¿En qué estados se lleva a cabo la verificación?
La verificación es obligatoria desde el 2017 en 16 estados de la República Mexicana:
- Baja California.
- Coahuila.
- Chihuahua.
- Ciudad de México.
- Estado de México.
- Hidalgo.
- Morelos.
- Puebla.
- Tlaxcala.
- Querétaro.
- Jalisco.
- Guanajuato.
- Michoacán.
- Oaxaca.
- Veracruz.
¿Qué autos están obligados a verificar?
Todos los vehículos de combustión interna registrados en la Ciudad de México y en los estados mencionados, deben de seguir un calendario semestral basado en el color de su engomado y la terminación de sus placas con excepciones para autos nuevos o eléctricos/híbridos.
¿Qué necesito para verificar mi auto?
Los documentos que deben de tener los automovilistas son:
- Tarjeta de circulación vigente.
- Identificación oficial.
- Si el auto es nuevo: factura nueva.
- Si ya cuentas con verificación: constancia de verificación pasada.
- Si se pasó la fecha de verificación: constancia de la verificación pasada.
- Si tuviste un rechazo: comprobante de rechazo.
¿Qué pasa si no puedo llevar a verificar mi auto?
En caso de que no puedas verificar a tiempo, debes solicitar una ampliación de periodo, si se te pasó la fecha por descuido, tendrás que pagar una multa aproximadamente arriba de los dos mil pesos la cual se paga a través de la Secretaría de Finanzas.
Verificar es importante, ya que cumples de manera legal, evitas multas, restricciones y contribuyes a la salud ambiental.
En caso de que no puedas llevar tu auto a cumplir este proceso, agenda una cita en WEST, nosotros vamos por tu auto, lo revisamos y lo verificamos por ti para que sigas haciendo lo que más te gusta.
